Reportes siniestros



En la radio un locutor comenta: 
Radio Nacional transmitiendo de costa a costa 
Comunicado urgente... 
... Múltiples ataques se suscitan al oeste del país, los reportes que llegan a nuestra redacción describen acontecimientos insólitos, según informes, grupos de individuos con fuerza y resistencia extraordinarias, mantendrían ataques cuerpo a cuerpo contra fuerzas de seguridad, varías comunidades se encuentran bajo constante ataque. 
Al parecer y de acuerdo a informes oficiales, la táctica del enemigo es bestial. Se abalanzan directamente sobre sus víctimas en busca de las arterias  o venas para cercenarles.
Estamos en estado de alerta roja, ¡Emergencia Nacional! exclama el portavoz de Casa Presidencial mientras entrega el comunicado oficial huyendo del sitio sin más dilación.
En la misiva se lee:  zona de emergencia, las comunidades al oeste de la capital se encuentran incomunicadas... 
"Más parecieran haber desaparecido". - dijo un funcionario que no quiso ser identificado-
"El silencio es desesperante" - dijo un oficial de comunicaciones. 
En la escena desde donde este reportero se encuentra se logra divisar a una joven asistente médica que trabaja en los puestos de emergencia, atendiendo a los pocos heridos que se aparecen, al ser entrevistada por este reportero,  ¿por qué ningún paciente habla de lo sucedido?... Ella no supo dar respuesta... 
No sé, se limitó a decir... 
La Fuerza Pública se repliega y se mantienen fuertes enfrentamientos... ¿Qué son estos seres? 
Las intervenciones armadas llevadas a cabo por las fuerzas de seguridad no han dado el resultado esperado y han sido más bien, poco efectivas. Este reportero tuvo acceso a información confidencial en la que se evidencia la terrible falta de efectividad de dichas armas de fuego contra el despiadado enemigo, el número de bajas es indeterminado hasta el momento. 
Mientras tanto...cámaras de seguridad captan algo en sus monocromáticas pantallas, ahora ya nadie las observa... Sin embargo estas muestran perturbadoras imágenes, silentes siluetas grises, destellos de violentos movimientos fugaces, cómo siempre, distorsionadas, nada claro, solo sombras. 
León Bonet. 

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